La compañía rusa de diseño Lebedev Studio, ha creado un prototipo de memoria USB que se caracteriza del resto por estar fabricada con cartón, para ser desechadas en el momento en el que el usuario lo desee y convertirse en una especie de portador de documentos desechables.
Las memorias USB se pueden obtener en diferentes tamaños: 4GB, 8GB Y 18GB, también vienen en paquetes de a 4 ‘dispositivos’ que le apuestan a lo ecológico y que además tienen sus divisiones listas para arrancar, debido a que el material con el que están hechas es fácil de manejar, pero también se pueden convertir en un ‘gadget’ frágil, razón por la que los creadores aconsejan no aguardar archivos delicados o importantes.
Si el contenido de la USB debe ser compartido con más personas y no se tiene acceso a algún computador, el usuario tiene la posibilidad de escribir encima de la memoria para así diferenciar y describir el contenido, teniendo en cuenta la cantidad de usb’s que pueden cargarse en un mismo lugar.
El bajo costo de la compra y producción de los también llamados ‘Flashkus’ y la ligereza de su portabilidad, permiten incluso regalarlas a las personas que en ocasiones piden prestada una memoria USB, reduciendo así los riesgos de pérdida de documentos y la inmersión de virus informáticos.
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